Ya habíamos hecho una primer entrega acerca de la seguridad en el automóvil. Si recuerdan se había comentado que existen básicamente dos tipos de seguridad en el automóvil: la seguridad activa y la seguridad pasiva. La activa es la que denomina la habilidad que posee el vehículo para evitar accidentes y la seguridad pasiva se orienta a minimizar las consecuencias negativas, como daños y lesiones, en caso de un accidente. También habíamos mencionado lo que se llama la Deformacion Programada que supone una deformación del vehículo ante un choque, con una secuencia ordenada y gradual.
Uno de los principales elementos de seguridad pasiva es el Airbag o también llamada Bolsa de Aire. La Bolsa de Aire, aunque no están preparados para avivarse en impactos laterales o traseros, proporcionan una excelente seguridad para los impactos frontales del vehículo. Para ello los autos están dotados de un modulo de control de airbags, bajo la consola central que se encarga de regular los airbags frontales.
En caso de tener airbags laterales, los sensores estarán ubicados bajo los asientos. Es entonces, que cada sensor disparara la bolsa de airbag si la colisión corresponde a la dirección protegida por el mismo, tanto del lado derecho como del izquierdo. La colisión frontal, para que se activen los airbags delanteros, será necesario que ocurra a mas de 14.5 Km/hr.
Los airbags laterales protegen la zona blanda del torax lateral del ocupante del asiento, ya que son abiertos en tan solo 25 a 30 milisegundos gracias a la inyección de un gas a base de sodio azoico y nitrato de potasio. Cuando la cabeza hace impacto sobre la bolsa de aire, esta se desinfla a través de un orificio. De ninguna manera el airbag debe funcionar como un globo, ya que causaría mas daño, al hacer rebotar la cabeza.
